René Higuita, portero de la selección colombiana, el día 3 de julio de 1989 protagonizó un momento épico al convertir el primer gol anotado por un portero en la historia de la Copa América.
El escenario fue el Estadio Fonte Nova en Salvador, Brasil, donde Colombia se enfrentaba a Venezuela en un emocionante encuentro.
El partido resultó ser un espectáculo vibrante, culminando en una victoria para Colombia por 4-2 sobre Venezuela.
Sin embargo, lo que hizo que este evento fuera inolvidable fue la actuación de René Higuita en el minuto 36, cuando el arquero no solo defendió su portería con destreza, sino que también dejó una huella imborrable al anotar un gol desde el punto de penal.
El Estadio Fonte Nova, con una asistencia de 26,000 espectadores, fue testigo de un hito histórico en el fútbol sudamericano. Higuita se convirtió en el pionero al abrir la puerta a una nueva dimensión del juego, demostrando que los arqueros también podían contribuir al marcador de una manera tan espectacular como los delanteros.
El árbitro hondureño Rodolfo Martínez fue el encargado de dirigir este encuentro memorable, en el que Higuita compartió protagonismo con los goleadores de campo como Iguarán y De Ávila, quienes contribuyeron con anotaciones en los minutos 46, 71, 75, y 88.
Este logro no solo quedó grabado en la memoria de los aficionados colombianos, sino que también resonó en todo el continente, estableciendo un precedente emocionante y cambiando la percepción sobre el papel de los arqueros en el fútbol. El día en que René Higuita se convirtió en el primer guardameta en marcar un gol en la Copa América seguirá siendo una página dorada en la rica historia del deporte rey en Sudamérica.
Fuente de imagen https://www.flickr.com/photos/nazionalecalcio/20592014234